Contame algo lindo....

Contame algo lindo....
Para conocer relatos de barrio, de música, de nuestra historia y de quienes la forjaron....

03 mayo, 2011

A 60 años de su muerte...



 A  HOMERO
Música: Aníbal Troilo
Letra: Cátulo Castillo

Fueron años de cercos y glicinas,
de la vida en orsay, del tiempo loco.
Tu frente triste de pensar la vida
tiraba madrugadas por los ojos...
Y estaba el terraplén con todo el cielo,
la esquina del zanjón, la casa azul.
Todo se fue trepando su misterio
por los repechos de tu barrio sur.

Vamos,
vení de nuevo a las doce...
Vamos
que está esperando Barquina.
Vamos...
¿No ves que Pepe esta noche,
no ves que el viejo esta noche
no va a faltar a la cita?...
Vamos...
Total al fin nada es cierto
y estás, hermano, despierto
juntito a Discepolín...

Ya punteaba la muerte su milonga,
tu voz calló el adiós que nos dolía;
de tanto andar sobrándole a las cosas
prendido en un final, falló la vida.
Yo sé que no vendrás pero, aunque cursi,
te esperará lo mismo el paredón,
y el tres y dos de la parada inútil
y el resto fraternal de nuestro amor...

21 marzo, 2011

Gracias, Negro....!!!!

Mente brillante

Argentino Luna decía....

ME PREGUNTAN COMO ANDO...

Me preguntan cómo ando y respondo más o menos…
con angustias en el alma por lo que le han hecho al pueblo.

 
Cómo puede andar un hombre que no ve al otro contento,
que ve niños en la calle, sin escuelas, cartoneros,
gorrioncitos desnutridos, ojos tristes analfabetos,
que ve madres mendigando sin honor y sin respeto.

 
Me preguntan cómo ando y respondo más o menos…
si una manga de langostas se ha robado hasta los sueños,
gobernando desgobiernan, porque la justicia es de ellos
y con nombres y apellidos sinvergüenzas andan sueltos,
esta manga de ladrones que se roba mis impuestos
mercenarios de la vida, jubilados con privilegios.

 
Me preguntan como ando y respondo más o menos…
Porque siento que la bronca me va ganando terreno
y es allí donde me digo, si es que me gana qué haremos
ya somos muchos con bronca y se nos acaba el tiempo.

 
Me preguntan cómo ando y respondo más o menos…
Por los niños sin cobijo, por los brazo del obrero,
por los llantos de las madres, por la paz de lo abuelos.

Habrá que ganar la vida, hacer la vida de nuevo
Habrá que ganar la vida, hacer la vida de nuevo
Un puñado de mal paridos no puede ganarle a un pueblo

13 marzo, 2011

Imagen de mujer

Amapola

¿Quién puede olvidar la escena en “El mago de Oz” donde Dorothy y el León Cobarde están en peligro de caer dormidos para siempre en los campos de amapolas?
La amapola ha sido asociada con el sueño eterno desde los tiempos de los griegos, cuando eran usadas como ofrendas para los fallecidos. Quizás los efectos del opio—intensa relajación y desaparición de la ansiedad—también contribuyeron a hacer a la amapola un símbolo apropiado para un cementerio. Aunque no es común en la Recoleta, la imagen puede ser hallada ocasionalmente en puertas de hierro forjado y placas.
(After Life)

Tronco cortado

Se lo puede apreciar en la bóveda de Hilario Ascasubi. Es el único que puede verse en la Recoleta y simboliza la muerte de algo que ya no se puede recuperar....

Atrapados en un momento

Notable inspiración

Jullieanne Cosgrove es una joven fotógrafa que logra un ensamble perfecto entre la arquitectura propia de la Recoleta y el papel que juegan los reflejos de los vitrales cercanos.... es maravilloso. Los invito a conocerlos.

La familia Bustillo

Se dice que la bóveda de la familia Bustillo es la más antigua del cementerio de Recoleta, porque ostenta la fecha "1823" en su frente, aunque quizás esta no sea la fecha de su construcción, sino la del fallecimiento del primer miembro de la familia en ser enterrado en esta necrópolis.
Allí descansan, entre otros, los militares Manuel José y José María Bustillo y los hijos de éste, Alejandro (arquitecto) y Ezequiel, primer presidente de la Dirección de Parques Nacionales.
Entre sus obras figura el afianzamiento de la ciudad de San Carlos de Bariloche, la fundación de pequeño centros turísticos, como las Villa Catedral, Traful y Mascardi y la construcción del hotel Llao Llao diseñado por su hermano.
Alejandro fue además del creador del Llao Llao, el arquitecto del Hotel y Casino provincial de Mar del Plata, de la Catedral de Bariloche y de la Casa Central del Banco Nación, frente a Plaza de Mayo.
(Diego Zigiotto)

De Molina Campos

Teatro Liceo

El teatro Liceo, sobre la esquina noreste de Rivadavia y Paraná, es el teatro en funciones más antiguo de Buenos Aires.
Fue fundado en 1872 con el nombre de El Dorado, hasta que en 1918 tomó su denominación actual. Entre los artistas que ocuparon su sala por largos años, se pueden nombrar a Luisa Vehil y a Enrique Pinti, entre otros.
(Diego Zigiotto)

18 febrero, 2011

Esquina histórica

En el vértice de la ciudad que forman las calles Bolívar y Alsina, está la Librería de Ávila. Es el lugar donde se vendió el primer libro cuando Buenos Aires era apenas una aldea grande. Nació en 1785 como un boliche de ramos generales y muy rápido pasó exclusivamente a comercializar libros. Se la conocía como la Librería del Colegio. Pasó por muchas etapas e incluso estuvo cerrada y abandonada, hasta que, en 1993, Miguel Ávila, un librero de alma, entabló conversaciones con el Arzobispado de Buenos Aires (propietario del edificio) para reabrir el local. Sucede que una empresa de comidas rápidas había hecho ofertas muy cuantiosas. "Me dicen: *Dios cierra una puerta y abre una ventana...Usted es la ventana", recuerda Miguel, sobre sus charlas con el clero.
Así, con la ayuda de colegas, intelectuales, amigos y la Iglesia logró la reapertura de esta casa, el negocio más antiguo de la ciudad dedicado al mismo rubro.
"Muchos vienen a sacarse una foto y los turistas vienen a visitarla porque es el único negocio de la época hispánica que se mantiene en el mismo lugar", sostiene Miguel.
En sus anaqueles atesora obras invalorables de 1662.
(Franco Varise- Diario La Nación)

Mesas que hablan

El Imparcial cumplió 150 años. Es el restaurante más antiguo de la ciudad y, según dicen, el segundo del mundo, entre los antiguos. La leyenda cuenta, según Uki Goñi en su libro "Perón y los alemanes", que un mozo entregaba mensajes de espías detenidos durante la Segunda Guerra Mundial. Lo cierto es que la paella, hoy, es una de las más apetecidas de la ciudad. Y el staff de mozos, casi todos con 40 años de servicio, prefieren no hablar de espías.
 "El Imparcial" es más que mi casa, y lo mejor es que acá no hay platos individuales: todos son para compartir" dice Juan Farías.
El nombre "El Imparcial", según otra historia, surgió del deseo del primer dueño, Manuel García, de que no se hablara de política ni de religión en las mesas. De poco sirve la anécdota porque Tito Janín, un cliente de 84 años, comenta que él recuerda cuando los franquistas y antifranquistas dividían el salón y se pasaban duras facturas. "Ahora hay muchos lugares, pero éste es el mejor de Buenos Aires para comer pescado", sentencia Janín.
Justo en la esquina de enfrente está el restaurante El Globo, que cump´lió 108 años. Y en Sarmiento al 1300 aún funciona el restaurante del Club del progreso, quizás el más antiguo, fundado en 1852, pero bajo distintas concesiones. Allí comieron 17 presidentes constitucionales.
(Franco Varise - Diario La Nación)

02 enero, 2011

CSI Recoleta

El médico que había hecho la autopsia a la víctima del loco Castruccio se llamaba Manuel Blancas. Era un médico forense de lujo, con gran capacidad de deducción en la escena del crimen, como solemos verla en los protagonistas de la serie televisiva CSI (Crime Scene Investigation). Una mañana Blancas fue requerido porque en un terreno baldío del bajo de Recoleta (zona muy peligros por aquel tiempo), había aparecido un cuerpo apuñalado.
Blancas llegó a la escena del crimen, se paró frente al cadáver un par de minutos, se agachó, revisó las heridas mortales, caminó a su alrededor y sentenció: "Este hombre tenía entre 38 y 40 años, y murió hace 10 o 12 horas. No fue degollado aquí. Lo hirieron mortalmente con un facón de los que se usan para carnear animales en el matadero municipal. Fue transportado ya muerto a este paraje, recostado de espaldas, en el lomo de tordillo al cual le falta la herradura en la pata delantera izquierda. El hombre que trajo hasta acá el cadáver vino del sudeste y luego de lanzarlo aquí, regresó por el mismo camino. Ah!, un detalle: el criminal usa alpargatas".
Los policías acudieron al matadero de Parque de los Patricios, revisaron las patas de los caballos con pelaje tordillo y al encontrar a uno que le faltaba la herradura en su pata izquierda, detuvieron al propietario, quien en ese instante confesó el crimen.
Blancas no se había equivocado en nada.
(Daniel Balmaceda - Historias Inesperadas de la Historia Argentina)

Barrancas de Belgrano

Los senderos de las barrancas de Belgrano están formados por ladrillos como el de la foto. Algunos provienen, como éstos, de San Isidro. En el lugar donde se extraía la tierra para elaborarlos se fue formando un hoyo: una cava. Así se conoce a la famosa villa de emergencia que se instaló en el lugar.

Bar Palacio

El bar Palacio, en la esquina noroeste de Federico Lacroze y Fraga, es al mismo tiempo un museo dedicado a la fotografía: allí pueden verse alrededor de 200 cámaras, largavistas con cámaras de fotos incluidas, flashes de magnesio, anillos de carey como portarretratos, una minicámara acuática rusa de la década del 30 y otra alemana, que se usaba para espionaje.
Entre otras curiosidades, el local expone un visor de imágenes estereoscópicas de 1893: es un aparato óptico que superpone dos imágenes de un objeto en una sola perspectiva, generando un efecto de volumen, o de 3 dimensiones.

Mirador Massué (1907)

Mirador Massué

La esquina de Tucumán y Talcahuano conserva la torre del que fuera el palacio Massué. Construido en 1907 por el arquitecto Massué, era uno de los más extravagantes edificios de Buenos Aires, sobre todo por su mirador en forma de templete griego.
Está ornamentado con 4 caras de seres mitológicos y 4 rostros femeninos. Se salvó de la piqueta y fue remodelado: actualmente su imagen se duplica en el reflejo de la torre espejada que lo respalda.